Salud
Tomarse un minuto, puede cambiar una vida
11/09/2017. Cada 10 de septiembre se conmemora el Día Mundial para la Prevención del Suicidio, motivo por el cual hoy lunes habrá una jornada de capacitación. Según la OMS una persona cada 40 segundos se quita la vida en el mundo.
En el marco de la conmemoración al Día Mundial para la Prevención del Suicidio, fecha fijada en cada 10 de septiembre (ayer domingo) hoy lunes se desarrollará una jornada de sensibilización sobre el tema.
Será desde las 10 en el Foro de Intendentes de Salta (Leguizamón 2.060) donde el Ministerio de Salud Pública llevará a cabo una jornada de capacitación denominada “Consideraciones esenciales en el manejo de la información y producción periodística en Salud Mental”.
La actividad libre y gratuita que está destinada a periodistas, comunicadores sociales, docentes y estudiantes avanzados de comunicaciones.
La finalidad de la formación es otorgar las consideraciones mínimas para el ejercicio de una comunicación responsable en el ámbito de la Salud Mental.
Asimismo se actualizarán herramientas de producción informativa en el marco de lo dispuesto por la Ley Nacional de Salud Mental y sus recomendaciones para el tratamiento de la temática en los medios de comunicación.
DÍA MUNDIAL PARA LA PREVENCIÓN DEL SUICIDIO
La Organización Mundial de la Salud estima que más de 800.000 personas mueren por suicidio cada año -lo que supone una persona cada 40 segundos-, siendo los intentos de suicidio hasta 25 veces más.
El trágico efecto dominó significa que hay muchas más personas que han sido afectadas por el suicidio o han estado cerca de alguien que ha tratado de acabar con su propia vida.
Detrás de estas estadísticas están las historias individuales de aquellos que, por muchas razones diferentes, han cuestionado el valor de sus propias vidas.
En el Día Mundial de la Prevención del Suicidio de 2017 el lema es "Toma un minuto, cambia una vida". Ofrecer una palabra suave de apoyo y escuchar de una manera no crítica puede hacer toda la diferencia.
Las personas que han vivido un intento de suicidio tienen mucho que enseñar sobre cómo las palabras y acciones de los demás son importantes.
A menudo describen darse cuenta de que no querían morir, sino que en cambio querían que alguien interviniera y los detuviera. Muchos dicen que buscaron activamente a alguien que pudiera sentir su desesperación y preguntarles si estaban bien.
Las personas suelen ser reacias a intervenir, incluso si están muy preocupados por alguien, por miedo a no saber qué decir. Sin embargo, quienes pasaron por un episodio de pensamiento suicida severo describen que no estaban buscando un consejo específico, sino compasión y empatía.