Le quedan tres grandes premios en la Fórmula 1 a la escudería Williams que hoy integra el piloto argentino, allí se juega una butaca para la próxima temporada. Además de Alpine, también Red Bull lo quiere: está entre él y Lawson, éste cabeza a cabeza tendrá su primer episodio en Estados Unidos el fin de semana.
El fin de semana no será uno más en la vida de Franco Colapinto, ya que el piloto argentino tiene por delante tres grandes premios en las que está en juego la posibilidad de la incorporación definitiva a una escudería, Alpine y Red Bull. Pero hay otro en el camino de esa butaca, se trata de Liam Lawson, con el que deberá luchar para que un argentino vuelva a la fórmula 1.
Christian Horner y Helmut Marko, quienes han liderado las decisiones sobre pilotos en Red Bull y su filial VCARB, tienen posturas opuestas. El primero ve en Colapinto una gran promesa y estaría dispuesto a otorgarle un asiento en el equipo principal desde el próximo año, decisión que relegaría a Lawson y a Tsunoda otro año en VCARB; el segundo, por su parte, considera que Lawson ya ha demostrado su potencial y es el mejor candidato para acompañar a Verstappen, dejando que el pilarense pase un año de adaptación junto al japonés.
En ese sentido, el neocelandés sacó una ventaja en lo que fue el GP de Brasil -terminó noveno-. Si bien no figura entre los primeros puestos del campeonato ni tiene gran relevancia en la tabla general, tuvo una actuación sobresaliente en la lluvia que inundó Interlagos, lo que fortalece su perfil como posible compañero del neerlandés.
Liam Lawson de 22 años dejó en claro que combina talento y determinación. En la última competencia mantuvo a raya al mexicano Sergio “Checo” Pérez y a Lewis Hamilton con precisión y sin errores, éstas maniobras recordaron a la agresividad controlada de Verstappen. Sin embargo, su estilo directo también le ha generado polémicas, como ocurrió en México, donde un gesto despectivo hacia Checo le costó críticas. Pese a esto, su desempeño sigue elevando su reputación y así lo sostuvo: “No vine aquí a hacer amigos, estoy para ganar”.
El ascenso de Lawson parece opacar las posibilidades de Colapinto, quien era señalado como candidato a Red Bull antes del GP de Brasil. Aunque medios llegaron a afirmar que el acuerdo estaba cerrado, la sólida actuación del oceánico, además del choque y abandono del argentino, lo posiciona como favorito.
El kiwi cuenta con una ventaja clave: su lugar dentro del programa de desarrollo de Red Bull, algo que Colapinto, actualmente vinculado a Williams, no posee. Además, liberar al piloto argentino implicaría 20 millones de dólares como compensación, una cifra que podría complicar cualquier negociación.
Desde lo deportivo, Lawson parece haber tomado la delantera. Sin embargo, la salida de Pérez deja a Red Bull con un vacío en el mercado latinoamericano, una brecha que Colapinto podría llenar desde un punto de vista comercial. A pesar de esto, el rendimiento en pista parece ser el factor decisivo, y hasta el momento, el neocelandés ha demostrado estar un paso adelante.
Franco Colapinto y Eugenia “China” Suárez
Más allá de lo deportivo el piloto argentino fue noticia el fin de semana por su encuentro con la “China” Suarez, el domingo después del medio día fue vista la pareja por turistas argentinas y los filmaron.
La Gran Vía, donde fueron vista la pareja, es la arteria más vibrante de la capital española y una de las más transitadas de Europa. Estaban vestidos con gorras negras y lentes de sol, ambos intentaban, al menos en apariencia, pasar inadvertidos. La señorita que los filmó se acercó a pedirle una selfie al deportista, que aceptó muy amablemente y allí se dio cuenta que la mujer que lo acompañaba era Eugenia Suárez, que sonriente miraba la situación.
La filmación de la señorita argentina fue compartida en la red social, Tik Tok, video que en menos de 24 horas se hizo viral y generó gran revuelo. Los comentarios en el posteo hicieron que el manager de Colapinto, Jamie Campbell-Walter, reaccionara enojado, por eso escribió en su red X lo siguiente: “Escuchen con atención porque solo lo diré una vez: dejen de opinar, dejen de insultar y de decirnos cómo debemos hacer nuestro trabajo”.
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