El propietario de una carnicería explicó que los comercios de barrio “no pueden bajar” su precio porque, si bien se mantiene el valor, los costos aumentaron considerablemente.
Este miércoles, en diálogo con Profesional, Dardo Romano, propietario de una carnicería y referente del sector cárnico, explicó que la carne tuvo aumentos desde que comenzó el año hasta marzo. Sin embargo, desde ese mes hasta la fecha está “relativamente estable” y en las últimas dos semanas hay algunas categorías que bajaron.
Sin embargo, Romano criticó que en los últimos seis meses la inflación continuó aumentando, pero los precios de la carne no, por lo que quedó “totalmente relegada”. A su vez, dijo que la principal razón es la baja del consumo.
“En pizarra es poco lo que se bajó, habitualmente se hacen promociones y ofertas”, dijo.
En ese sentido sostuvo que hubo un aumento muy fuerte de los costos que tiene un carnicero, como los sueldos, el combustible, los impuestos, la luz, entre otros.
“La carne en el mercado había bajado algo, pero es difícil que esa baja llegue a la carnicería, por los costos y la dinámica. Hay una falta de venta muy grande que hace complicado mantener el negocio. Si hay una baja de venta y el carnicero viene perdiendo plata, es difícil que baje el precio”, insistió.
Sin embargo, explicó que algunos frigoríficos sí bajan sus precios o hay subas que no se aplicaron. Por lo tanto, muchos carniceros tratan de mantener la venta y sacrifican su rentabilidad.
Por último, expresó que uno puede decir que el precio de la carne bajó, lo pones en los diarios y la gente va a comprar carne, pero a los dos días sube de nuevo: “Es peor, en vez de hacer algo duradero, decimos algo que realmente no es. Los costos y la carne no pueden bajar por la dinámica inflacionaria”, concluyó.
Comentar