En un juicio abreviado, un hombre de 37 años fue condenado a tres años de prisión condicional por estafar al menos a seis personas que compraron casas prefabricadas.
El imputado engañó a los denunciantes simulando tener una empresa de construcción de viviendas prefabricadas. En todos los casos usó el mismo modus operandi, que consistía en en ofrecer sus servicios a cambio de la entrega de importantes sumas de dinero como adelanto. Algunos de los damnificados llegaron incluso a cancelar el precio total de la vivienda.Concretado el ardid, el acusado evadía luego los reclamos de los contratantes sin dar una respuesta satisfactoria hasta que finalmente perdían el contacto con él.
En el mismo fallo, la Justicia le impuso reglas de conducta que deberá cumplir durante tres años.
Entre ellas, tiene prohibido acercarse a 300 metros de los denunciantes, de sus domicilios y lugares donde realicen sus actividades habituales; prohibición de mantener contacto por cualquier medio con ellos; prohibición de ejercer actos de violencia física y psíquica en contra de los damnificados.
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