Así lo indicaron por Profesional desde el Sindicato de Empleados de Comercio. Detallaron que, además, el sector sigue afectado por el alto porcentaje de informalidad.
La falta de entrada de dinero en los locales comerciales derivó en un motivo para el cierre y los despidos, cuyos números son alarmantes en la provincia de Salta y el país.
En diálogo con Profesional Ángel Ortiz, secretario gremial del Sindicato de Empleados de Comercio, detalló que en los primeros seis meses del año se perdieron mil puestos de trabajo, en tanto en el país rondan alrededor de 150 mil bajas.
En ese sentido, detalló que las dificultades para mantener abierto un local comercial en estas épocas son muchas. Los altos costos de los alquileres y los servicios que viven cada familia de Argentina, en el caso de los comercios se multiplican varias veces porque el consumo es mayor.
En Salta, según el gremialista, la situación económica no es mejor que en el resto del país y los locales comerciales, principalmente los comercios chicos, familiares que generalmente se encuentran más alejados del microcentro salteño, comenzaron a cerrar sus puertas y persianas.
Por otra parte, indicó que a esa cantidad de despidos de trabajadores registrados durante el primer semestre en Mendoza, hay que sumarle el alto porcentaje de informalidad. Agregó que los trabajadores informales es decir, aquellos que no están registrados, lo que comúnmente se llama “trabajo en negro” representan más del 40% de toda la masa.
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