Pasadas las 18 comenzó el recorrido de la llama votiva desde la Catedral Metropolitana hasta el cuartel del Regimiento de Granaderos a Caballo. El Presidente se hizo presente en el destino final.
Como parte de las actividades por el aniversario de la muerte de José de San Martín, una antorcha encendida con la “llama votiva” fue trasladada por las calles de Buenos Aires hasta el cuartel del Regimiento de Granaderos a Caballo.
Según la tradición, el fuego evoca el espíritu del General y es también un homenaje a aquellos soldados que participaron en el proceso de independencia del país.
Este 17 de agosto se cumplen 174 años del llamado “Paso a la Inmortalidad” de San Martín y por este motivo, se llevó a cabo el desfile de Granaderos a Caballo por la Capital Federal. Los restos del “Padre de la Patria” se encuentran en la catedral metropolitana.
El dato es que Javier Milei se hizo presente en el tramo final del recorrido. “El Presidente de la Nación agradece la invitación del Ministerio de Defensa de la Nación para participar de la ceremonia de encendido de la llama votiva en conmemoración del paso a la inmortalidad del General Don José de San Martín, a la que asistirá con la alegría de saber que eventos como este llenan de orgullo a la Nación”, informó el vocero Manuel Adorni.
Milei participó brevemente en el tramo final del recorrido y recibió a los granaderos en el cuartel del Regimiento de Granaderos a Caballo.
Hoy es también el Día del Soldado de la Independencia. El Regimiento de Granaderos a Caballo es una unidad militar emblemática de Argentina que desempeñó un papel destacado durante la Guerra de Independencia. Se creó oficialmente el 16 de marzo de 1812, en la ciudad de Córdoba, con el objetivo de formar una unidad de élite de caballería que pudiera realizar misiones especiales y ser una fuerza de choque en el campo de batalla. Participaron en varias batallas clave durante la Guerra de Independencia, incluyendo la Batalla de San Lorenzo en 1813 y la Batalla de Chacabuco en 1817.
“San Martín consagró su vida a la Libertad, y para alcanzarla preparó al mejor ejército, desafió la inmensidad de los Andes y marchó hacia la gloria, conquistando la causa más noble: la independencia. Hoy, sus Granaderos mantienen vivo su legado, siendo la custodia eterna de nuestros ideales y del espíritu de lucha que nos define”, señalaron desde el ministerio de Defensa que preside Luis Petri. Y agregaron: “Que nunca se apague la llama que el Padre de la Patria encendió en nuestros corazones y que sus palabras resuenen para siempre”.
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