Desde la Secretaría de Salud Mental y Adicciones de la provincia brindaron algunas indicaciones y claves para detectar signos de alarma. Comenzar a hablar, es el primer paso de la prevención, indicaron.
Este martes se celebra el Día Mundial de Prevención del Suicidio, instituido por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Se calcula, según datos del 2022, que cada año se suicida casi un millón de personas, lo que supone una tasa global de una muerte cada 40 segundos.
Consultado al respecto el secretario de Salud Mental y Adicciones, Martín Teruel, expresó la necesidad de derribar barreras, como el estigma, crear conciencia y crear una cultura de comprensión y apoyo para prevenir el suicidio.
Por Profesional, sostuvo que todos, individuos, comunidades, organizaciones y gobiernos tienen un papel importante que desempeñar para cambiar la narrativa sobre esta problemática.
Sobre las pautas de alarma y la prevención, el funcionario indicó que trabajan para promover la colaboración y el autoempoderamiento de las partes interesadas para abordar la autolesión y el suicidio a través de acciones preventivas.
Detalló que, esto se puede lograr mediante el desarrollo de capacidades de los proveedores de atención médica y otros actores relevantes, mensajes positivos e informativos dirigidos a la población general y grupos en riesgo como los jóvenes, y facilitando un debate abierto sobre salud mental en el hogar, la escuela y el lugar de trabajo.
Asimismo, animó a aquellos que estén contemplando o afectados por estos pensamientos a compartir sus historias y buscar ayuda profesional. Aquellos que consideren que están atravesando una situación similar o conoce a alguien que sospecha pueden estar padeciendo, deben comunicarse al 4213387 o acercarse a las oficias de las Secretaria en avenida Sarmiento al 600.
Por otra parte, explicó que al hablar de suicidio, “debe tenerse en cuenta que se trata de un acto que puede prevenirse y evitarse.”
En ese marco, el Secretario sostuvo que una persona que transita un proceso suicida puede dar múltiples señales de alerta, por lo que es necesario que los distintos actores sociales los conozcan para poder brindar ayuda.
A continuación, los gestos, comportamientos y expresiones de personas que tal vez se encuentran en riesgo, que pueden ser señales de alarma, según el titular de la Secretaría:
- Aislamiento de las amistades, familiares y actividades regulares.
- Descuido inusual de la apariencia personal.
- Cambio notorio en la personalidad.
- Pérdida de interés en las actividades que hasta ese momento eran consideras placenteras.
- Decir que “uno” / “una” es un problema para los demás.
- Arreglar asuntos pendientes y regalar pertenencias.
- Alucinaciones o pensamientos extravagantes.
- Despedirse de personas queridas.
- Dificultad para comunicarse.
- Cambios en los hábitos alimenticios y de sueño.
- Percepción de una baja capacidad para resolver los problemas